Vivimos en un mundo totalmente interconectado en el que nuestra capacidad para mantener un control total sobre nuestra información privada es limitada. Las encuestas muestran que la mayoría de las personas están muy preocupadas por su privacidad y la falta de transparencia en el universo digital. Esto se aplica especialmente a las identidades digitales.
¿Identidad digital? es uno de los términos que deberás incorporar a tu vocabulario y que sin dudas va a formar parte de nuestro día a día.
Contenidos
Identidad Digital ¿Qué significa?
Una identidad digital es la información y los datos que identifican a un individuo en el mundo digital. En otras palabras: una representación electrónica de un individuo que suele utilizarse para acceder a servicios en línea, realizar compras e interactuar con otros en plataformas digitales.
Una identidad digital puede definirse como la presencia digital de un individuo. Más concretamente: un conjunto de atributos capturados digitalmente, como el nombre, la fecha de nacimiento y el sexo, combinados con credenciales vinculadas a un identificador único.
Una identidad digital sirve como credencial si
- Un individuo sólo tiene una identidad dentro de un sistema.
- Un individuo es consciente de que su información está registrada.
- Si la identidad se verifica y autentica para cumplir las normas gubernamentales y del sector privado, así como las posibles normativas vigentes
- el individuo puede estar seguro de que sus datos están a salvo y son accesibles para él.
A diferencia de un documento de identidad en papel, un documento de identidad digital puede autenticar a una persona remotamente (a distancia) a través de canales digitales. Puede seguir sus actividades y recopilar información, como datos personales, comportamiento e interacciones.
Para verlo desde la perspectiva de un individuo: La identificación digital es similar a la identidad física y la personalidad de una persona. Por lo tanto, los individuos necesitan poder decidir cuál es su identidad digital y tener el control de lo que quieren compartir.
Desde una perspectiva más técnica, una identidad digital es la información completa que se refiere a una persona, una organización o incluso un dispositivo que se utiliza para realizar la autenticación en línea.
¿Cuáles son los tipos de identidad digital?
Dependiendo de las actividades que un usuario quiera realizar, necesitará un tipo de identificación diferente. Aunque la finalidad, los elementos de datos y los requisitos pueden diferir, las identificaciones tienen algo en común: un código numérico o alfanumérico que sirve como identificador único y, por tanto, mejora considerablemente la seguridad.
¿Cómo funciona hoy la identificación digital?
Para utilizar cualquier tipo de servicio digital, los usuarios deben autenticarse en el sitio web del proveedor con sus credenciales. Los procedimientos para registrarse y luego iniciar sesión son casi tan numerosos como los sitios web. Los usuarios acaban teniendo innumerables nombres de usuario y cuentas. Lo que siempre termina en una gran molestia o contrariedad a la hora de recordar estas credenciales.
Un gran número de proveedores de servicios digitales permiten la autenticación a través de cuentas sociales, como Google, Facebook y Apple.
Si los usuarios quieren hacer compras en alguno de los muchos sitios de ventas online, en mucho de los casos podrán abrir una cuenta desde cero o a través de su cuenta Google existente. Esto es posible porque Google actúa como proveedor de identidad (IdP) y las distintas tiendas online actúan como proveedores de servicios que confía en Google.
La ventaja es obvia: al iniciar sesión a través de Google, los usuarios ahorran tiempo y tienen que gestionar una sola cuenta. Una que está ampliamente aceptada en el universo digital.
Pero también hay una desventaja: Google sabe exactamente con qué frecuencia inician sesión los usuarios en sus distintos proveedores de servicios.
Actores en el ecosistema de la identidad digital
Para que las identidades digitales funcionen de manera fiable y se aprovechen las ventajas que ofrecen, es necesario un ecosistema bien equilibrado. Este ecosistema debe caracterizarse por la confianza, la seguridad y la transparencia. Incluye a los siguientes actores clave:
Sociedad
«Sociedad» se refiere a los propietarios de la identidad: individuos que poseen y controlan su identidad digital creando y gestionando sus cuentas y perfiles en línea.
Es posible que haya que esperar entre 10 y 20 años para ver si el concepto de identidad digital es ampliamente aceptado por los individuos y se convierte en una realidad. Un factor clave, además de la seguridad, podría ser la facilidad de uso.
Gobierno
Los organismos gubernamentales y las organizaciones del sector establecen normas y reglamentos para las identidades digitales, asegurándose así de que sean interoperables, fiables, seguras y éticamente correctas.
Tecnología
Las empresas tecnológicas ofrecen soluciones para la gestión de identidades digitales, como sistemas de autenticación biométrica, plataformas de identidad basadas en blockchain y software de gestión de identidades y accesos.
Empresas
Las empresas, que prestan servicios en línea, son la contrapartida de los particulares. Dependen de las identidades digitales para autenticar a los compradores potenciales y proporcionar un acceso seguro a sus servicios, como las plataformas de comercio electrónico o medios sociales, y las instituciones financieras.
Verificadores de identidad
Son organizaciones que verifican la autenticidad y exactitud de la información sobre la identidad de una persona, como las agencias de información crediticia y los organismos gubernamentales.
¿Son seguras las identidades digitales? Los riesgos de la identidad digital
A la hora de implantar procesos en el mundo digital, es vital asegurar todo el mundo digital y conlleva una serie de preguntas y retos, todos ellos relacionados con la pérdida de control:
- ¿Mis datos se almacenan de forma centralizada o descentralizada?
En caso de almacenamiento centralizado, las identidades digitales podrían ser un objetivo atractivo para los atacantes. Como persona privada, ¿debo preocuparme por pagar un rescate? - ¿Mantendré el mismo identificador único toda mi vida?
La Unión Europea votó recientemente en contra de un identificador único para toda la vida por considerarlo una pérdida de anonimato. - ¿Todas las empresas utilizarán mi identidad digital para los servicios de inicio de sesión?
- ¿Quién es responsable de hacer cumplir la normativa?
- ¿Es mi responsabilidad compartir únicamente la información que mi contraparte realmente necesita? ¿O del proveedor de servicios? ¿O del gobierno?
Riesgos de la utilización de la identidad digital
De hecho, el riesgo, o más bien la reducción del riesgo, es uno de los principales impulsores de la adopción de las identidades digitales, además del ahorro de dinero.
Los riesgos de seguridad existen desde la aparición de la World Wide Web en los años noventa. Sin embargo, las identidades digitales son especialmente sensibles: Si se ven afectadas por una brecha de seguridad, un individuo puede sufrir un ataque personal, comparable a uno en la vida real.
Algunos de los riesgos que los individuos deben tener en cuenta al utilizar su identidad digital:
Robo de identidad
Un atacante puede acceder a información personal o incluso apoderarse de la identidad digital de un individuo, lo que puede dar lugar, por ejemplo, a un fraude financiero.
Privacidad
Las identidades digitales obligan a los usuarios a compartir información personal, lo que plantea problemas de privacidad. Las personas no siempre son conscientes de cómo se utiliza su información, quién tiene acceso a ella y cómo está protegida.
Información inexacta
A veces, una identidad digital puede basarse en información inexacta o incompleta, lo que da lugar a problemas con la verificación de la identidad o el acceso a los servicios.
Educación | Concienciar sobre la identidad digital
Aunque la identidad digital es un medio cómodo de autenticación para las personas, también proporciona una gran cantidad de información a los proveedores de servicios, incluidos los pensamientos, las necesidades y las acciones de una persona. Es imperativo ayudar a las personas a comprender lo sensible que es la información contenida en una identidad digital.
Ventajas y oportunidades
La identidad digital permite a las personas realizar transacciones y comunicaciones en línea con seguridad y confianza. Supone muchas ventajas para todos los agentes del ecosistema.
Con una identidad digital, los servicios y la información en línea están a sólo unos clics de distancia. La autenticación se realiza en un abrir y cerrar de ojos. La información personal, como los datos de la tarjeta de crédito, sólo tiene que introducirse una vez al comprar en línea.
Aplicado al B2B, el concepto de identidad digital podría aumentar la eficiencia de los procesos y, por tanto, resolver problemas en lugar de crearlos.
El futuro de la identidad digital
El futuro ha llegado para quedarse. La solución es una identidad descentralizada emitida por el gobierno que proporcione la base para una digitalización real.
Para que el ecosistema tenga éxito, será clave crear espacios de confianza. Estos sirven para colaborar de forma segura dentro del B2B y también del B2C. En un espacio así, es más probable que las personas estén dispuestas a intercambiar información sensible con sus homólogos, ya sean datos financieros o médicos. Como resultado, aumenta la eficiencia para todas las partes implicadas.
La digitalización va mucho más allá de escanear un papel y convertirlo en PDF. Se trata de introducir nuevos procesos en lugar de trasladar los procesos físicos 1:1 al mundo digital.
Self-Sovereign Identity (SSI)
La SSI aporta ventajas distintivas a las personas:
- Tienen pleno control de sus datos personales, que se almacenan en sus monederos móviles.
- Al utilizar su monedero, mantienen la confidencialidad de sus credenciales y actividades de inicio de sesión.
- Pueden revelar información de forma selectiva (concepto de «selective disclosure» o revelación Selectiva).
En el mundo digital, las personas se benefician de las pruebas de conocimiento cero (ZKP) con SSI. La ZKP permite al titular responder a una pregunta de sí o no sin revelar los datos. Dicho de otro modo y con un ejemplo práctico: Si una persona que quiere comprar alcohol puede simplemente dar una prueba de que es mayor de 18 años sin revelar su fecha de nacimiento.
La SSI, combinada con la seguridad de los teléfonos inteligentes, supone una enorme ventaja para la privacidad de los datos de los usuarios. Resuelve los principales problemas de privacidad existentes en los modelos de identidad centralizados y federados.
Promover la construcción de un ecosistema adecuado
Para promover el uso generalizado de las identidades digitales, es necesario un ecosistema que funcione: una infraestructura compartida, con normas definidas conjuntamente y muchas posibilidades para los más diversos actores del sistema.
Idealmente, el ecosistema cuenta con interfaces abiertas y normalizadas, tiene una gobernanza coordinada, no mantiene normas burocráticas e inhibidoras y permite una actualización práctica y automatizable de los datos de identidad digital.
Se puede convencer a los individuos para que se unan al ecosistema mediante
- Proporcionando interacciones cómodas, transparentes y comprensibles en el ecosistema
- Garantizando la confianza en el sistema, los participantes y el valor de los datos
- Permitiendo el uso gratuito y sin necesidad de dispositivos adicionales
manteniendo bajos los obstáculos de entrada
